Mama, take this badge off of me, I can't use it anymore.
Y la madre le respondió: "Hoy no, hijo. Mañana".
No sé si se llama Ascen.
No parpadea.
Desde luego, alguien la subió hasta el segundo.
No habla mucho.
Le caigo bién. Cada mañana, cuando abro la ventana, permanece inmovil. No hay rayo que le perturbe.
No le gustan las palomas. Es más de lechazo.
Se mudó antes que yo.
Por eso no abre la boca.
Solo espera.
La mirada fija en un punto, al que apuntan todas las lineas.
No son las puertas del cielo, pero quizá mañana...